Cuando comenzamos a vender una vivienda lo hacemos ilusionados: pensamos en sus puntos fuertes y creemos que la vamos a vender enseguida. Pero, muchas veces ocurre que pasa el tiempo y vemos que poca gente se interesa por ella. ¿Qué ocurre? ¿Por qué nadie quiere comprar nuestra casa?
Al vender una vivienda, especialmente cuando es la primera vez que los propietarios realizan este proceso, la gente suele cometer una serie de errores comunes por falta de experiencia e información insuficiente. Estos errores nos pueden salir caros si no les sabemos evitar o atajar a tiempo.
Por eso, desde Inmobiliaria Casablanca te explicamos cuáles son estos errores y las soluciones para vender una vivienda con el mayor éxito posible.
1- Establecer un precio inadecuado
Muchos vendedores suelen valorar de primeras su vivienda con un precio por encima del mercado. El componente emocional que le une con la casa provoca que se quiera vender a un precio elevado. Pero esto no hace más que reducir las probabilidades de venta.
Aunque se piense que iniciar la venta pidiendo una cantidad elevada va a permitir negociar un buen precio con los posibles compradores, lo cierto es que mucha gente ni se va a interesar si encuentra viviendas similares a un precio inferior.
Igualmente, establecer una cantidad de dinero por debajo del precio del mercado para tratar de vender más rápidamente, hará que no se obtenga la rentabilidad adecuada de ese inmueble.
2- Esperar a que llegue una oferta ‘buena’
A veces, los vendedores rechazan buenas ofertas porque esperan a que llegue una mejor. Hay que tener en cuenta que la mayoría de las personas van a tratar de rebajar el precio, por lo que es bueno tener un margen de precio razonable en el que podemos aceptar la venta.
En ocasiones, esa buena oferta es la primera porque son compradores muy interesados que han estado esperando un inmueble de esas características. Y muchos vendedores suelen rechazar esa primera oferta porque esperan que con el tiempo llegue algo mejor. Pero no suele ser así.
3- No contar con la documentación necesaria
Para poder vender una vivienda, es necesario tener en regla toda la documentación. A veces, el propietario quiere vender cuanto antes su inmueble y no revisa estos trámites por lo que al final no puede realizar la operación.
El Certificado de Eficiencia Energética es el documento que más suelen pasar por alto los propietarios. Este certificado es obligatorio desde 2013 para vender y alquilar una vivienda. Su función es medir el nivel de emisiones de CO2 según el consumo de energía de la casa.
Pero también es necesario contar con los siguientes documentos:
- La escritura de compraventa.
- El último recibo del Impuesto sobre bienes inmuebles (IBI).
- La acreditación de que la vivienda está libre de pago en la comunidad de vecinos.
- La Nota Simple del Registro de la Propiedad.
- Si existe un crédito hipotecario sobre la vivienda, es necesario el certificado de deuda pendiente.
- En algunos casos, también es necesaria la cédula de habitabilidad.
4- Esperar a que suba el precio para vender más alto
Un error muy común a la hora de decidir el momento en el que poner en venta la vivienda, es esperar a que suban los precios del mercado. El sector inmobiliario está en constante cambio y es especialmente cuando los precios están más estables, cuando es el mejor momento para vender porque hay más gente que se anima a comprar.
Esperar a que los precios suban y no ser flexible con las negociaciones supone tardar más en vender la casa.
5- Escoger al comprador inadecuado
A veces es mejor escoger una oferta a un precio inferior que una más elevada pero que no tienes la seguridad de que el comprador tenga absoluta solvencia económica.
Si existen dudas de que el banco no le pueda conceder una hipoteca lo mejor es no dar por vendida la casa, no quitar el cartel de vendido y seguir atendiendo vistas hasta que la operación no finalice en el notario.
6- No contar con presencia en la red
Hoy en día, lo primero que hacen los compradores es buscar pisos en internet, especialmente en portales inmobiliarios. Por tanto, no tener una presencia en los canales digitales reduce mucho las posibilidades de que te encuentren.
Contar con la ayuda de un profesional inmobiliario, como Casablanca, te ayudará a mejorar esa presencia en la red.
7- Cuidar los aspectos decorativos
A la hora de enseñar la vivienda, es importante cuidar los aspectos decorativos. Tener la casa en buen estado supone un plus para venderla cuanto antes.
Si existen enchufes rotos, paredes desconchabadas o despintadas conviene arreglarlo antes de poner la casa a la venta para que atraiga visualmente más a los compradores.
También es importante despersonalizar la vivienda, es decir, eliminar los detalles familiares como fotos y objetos personales. Cuando los compradores ven una casa tanto por fotos como en directo, tienen que verse viviendo allí y cuantos menos elementos de las personas que viven actualmente haya, más fácil será crear esta sensación.
8- No contar con la ayuda de un profesional
Aunque al inicio de embarcarse en el proceso de venta de una vivienda, mucha gente prefiere hacerlo por su cuenta para ahorrar costes, lo cierto es que contar con ayuda de profesionales inmobiliarios es fundamental.
El proceso de venta, como hemos visto, requiere conocimientos del mercado y sobre los trámites de gestión. Por lo tanto, un equipo especializado y con experiencia te asesora de manera adecuada sobre todo el proceso y está pendiente cada día de vender tu inmueble a la persona adecuada. Todo será mucho más fácil y rápido.
