La venta de vivienda de segunda mano ha sido una de las opciones más plausibles para muchos clientes en los últimos años y sigue siendo una de opciones más buscadas por parejas jóvenes o con hijos que desean cambiar de vivienda pero no pueden acometer los gastos de una casa a estrenar. Una casa de segundo uso en muchas ocasiones requiere de una reforma total o parcial para poder dejar la vivienda al gusto del comprador.
Esta semana, en el blog de Inmobiliaria Casablanca os dejamos algunos consejos para reformar la casa y no gastar demasiado.
– Analizar las necesidades. Dependiendo de las necesidades deberemos acometer una reforma más ardua u otra mucho menos. De ahí que sea bueno analizar lo que nos gusta y no de la vivienda y qué partes pueden servir de cara al futuro y cuales requieren ser retiradas o cambiadas. Esta labor la podemos realizar nosotros o una empresa profesional, que se encargará de examinar con detalle cada parte de la casa
Aunque puede parecer que la contratación de un experto encarecerá la reforma, su asesoramiento puede ahorrarnos dinero
–Nuevos aires. Cambiar el color de la casa puede ser una de las mejores ideas para darle un toque nuevo a tu futura casa. Una pintura fresca le suele dar una nueva visión a las estancias haciendo de una casa más antigua, una estancia moderna y acogedora.
-Revisar el estado de las tuberías suele ser una de las primeras acciones. Máxime si la vivienda comprada supera los 30 años o más de antigüedad. Si las mismas no se encuentran en buen estado, puede ser recomendable contratar a un fontanero que acometa el cambio de los conductos. No debes olvidar que ante cualquier reforma de esta naturaleza es necesario solicitar una licencia de obras que te puede dar tu ayuntamiento.
–Cambiar la cocina. La cocina suele ser uno de los espacios que más se cambian cuando se compra una casa de segunda mano. Dependiendo de los gustos del morador, puede aprovechar los muebles de la cocina antigua y hacer unos simples cambio de azulejo para ver el espacio como si fuera nuevo. Es una opción mucho más económica que el cambio completo de la cocina que puede subir el precio entre 4.000 y 6.000 euros.
–Plato de ducha. Una de las reformas que más se realizan en las casas de segunda mano es la que tiene lugar en el cuarto de baño. En este caso, la bañera pasa a un segundo plano convirtiendo la misma en modernos platos de ducha. Al eliminar el espacio de la bañera se consigue ganar espacio y el baño es mucho más diáfano y hasta más luminoso en algunos casos.
–Puertas y ventanas. Dependiendo de la antigüedad del inmueble será necesario o no cambiar las puertas y las ventanas de la casa. Para realizar esta tarea, nada mejor que un ebanista de confianza que pueda darnos ideas modernas acerca de materiales y colores que pueden ayudarnos a conseguir un espacio cómodo y elegante. En los últimos años, en cuanto a ventanas se refiere, se solicitan muchos cambios para conseguir que las ventanas sean oscilovatientes.
–Electricidad. El sistema eléctrico también suele cambiarse. Una correcta instalación de lámparas, focos y sus puntos de luz, y el uso de sistemas led, suele ser crucial para conseguir un ahorro en la factura de la luz.